domingo, 30 de noviembre de 2008

Duda Profesional

Desde hace tres años y ya van para cuatro que en mi cabeza ronda una duda, miedo, panico o quizas tratar de esquivar el fracaso. Parece ayer cuando el profesor de economia de la Escuela Sarmiento en Tucuman me dijo: "Aldana estas segura?, mira que hoy en dia cualquiera es periodista y no hay casi trabajo". En ese momento no me importo nada, es como todo lo que te dicen el ultimo año de la secundaria, no le das ni cinco de pelota.

Hoy me veo encerrada en esta pecera( la boleteria es justo esquina, mas sensacion de pecera te da) sin saber para donde disparar, con unas ganas terribles de hacer lo que realmente quiero, pero anestesiada totalmente. Arta de los Sociologos marxistas, que pienso que el dia de mañana si voy a una entrevista y le explico el incesto segun Lévi-Strauss, o la concepcion del poder para Foucault, o el aura segun Benjamin me van a sacar cagando...

Nunca dude que esto es realmente lo que quiero hacer y de lo que quiero vivir, la duda es si podre llegar. Me calma un poco saber que el otro año empiezo la especialidad, pero la mala onda vuelve: "mira que grafica es malisima en la facultad... es cualquiera". Me vuelve a importar una mierda lo que me dicen, lo que realmente me preocupa es lo que yo siento desde hace 3 años y ya van para 4....

lunes, 24 de noviembre de 2008

2001 Bis

El 20 de Noviembre de 2008 minutos antes de las 10:00 de la mañana, unas 130 personas del Movimiento Teresa Rodriguez, provenientes la mayoría de ellos de los barrios Maldonado, Muller, Villa Campo de la Ribera y Villa los Tinglados, se dirigieron al Supermercado Dino Express de barrio San Vicente, a exigir puestos de trabajo y ayuda alimentaria urgente, atento al permanente de aumento de los precios de la canasta básica y los cada vez más frecuentes despidos laborales.

En una acción rápida y coordinada ingresaron por uno de los portones de acceso. Apenas lo hicieron, los guardias de la seguridad interna que se vieron sobrepasados, atinaron solamente a advertirles que no podían pasar por tratarse de una propiedad privada, pero nada pudieron hacer ante la decisión de llegar hasta la puerta del centro comercial.Entonces los guardias llamaron a la policía, la que llegó rápidamente contabilizándose más de seis CAP y carros de asalto de la Guardia de Infantería.
El comisario inspector a cargo del operativo comunicó que ya había dado parte a la fiscalía de turno, ya que esta acción constituía “usurpación de propiedad privada”. Las puertas de ingreso fueron rápidamente cerradas por el personal de seguridad y bloqueadas con los carritos del supermercado.Los policías cerraron los portones de ingreso, por lo que los manifestantes quedaron dentro de la playa de estacionamiento. Poco después llegaron al lugar algunos militantes de la CUBa- MBS y del MTR de barrio José Ignacio Díaz, que no pudieron franquear el portón debido a la presencia policial pero que contribuyeron a crear un clima interesante para la negociación que tuvo lugar con la gerencia del Dino al golpear continuamente las rejas.

En medio de un clima de mucha tensión los directivos del supermercado accedieron a salir a dialogar con los una delegación , que fueron elegidos en asamblea en ese momento, y se mostraban visiblemente trastornados por la presencia de gente de barrios humildes en ese lugar.En todo momento alegaron no poder resolver el pedido de puestos de trabajo aduciendo fuertes caidas en las ventas que los obligan a recortar la cantidad de trabajadores empleados, pero se comprometieron a considerar la ayuda alimentaria para comedores comunitarios y merenderos.

Luego de permanecer en el lugar por más de dos de horas, la asamblea decidió retirarse para volver todas las veces que sea necesario, y continuar esta campaña contra el hambre y la inflación, contra los monopolios de la alimentación.En breve, las asambleas barriales del MTR discutirán cuáles serán los próximos pasos a seguir.Es de recordar que el supermercado Dino se instaló en barrio San Vicente en el predio de uno de los antiguos molinos Minetti que pertenecía a la provincia, que el gobernador de la Sota cedió graciosamente al empresario Euclides Bugliotti. Que este empresario es el máximo impulsor del desalojo de Villa La Maternidad , que queda justo al frente del supermercado, en función de sus intereses inmobiliarios en la zona.

sábado, 8 de noviembre de 2008

OSVALDO SORIANO

Aca les dejo el trabajo que hicimos con mi compañera Paula para las II Jornadas de Politica y Literatura de la facu, espero les guste...

INTRODUCCION


En el presente trabajo intentaremos reflexionar sobre las relaciones entre periodismo, política y literatura, en dos de las obras de Osvaldo Soriano: No habrá más penas ni olvido y Cuarteles de invierno.
En los textos se reconocen las divisiones de un país con diversos conflictos internos, de los cuales el autor refleja narrativa y creativamente.
El peronismo y la ambigüedad de posturas que generó entre sus adeptos, y el Proceso de Reorganización Nacional con su formula de violencia, despotismo y negligencia anti-democrática son fenómenos de la historia argentina, que “el Gordo” cronicó con una simplificación exacta.
Como punto de partida, escogimos la doble significación del término de política:
1) Ejercicio de poder por parte del Estado, concepción institucional y tradicional.
2) La libertad de los ciudadanos para el uso de la palabra publica.

Ambas acepciones están explicitas en las obras ya señaladas, ya sea desde su rol periodístico critico y a la vez narrativo.

Por ultimo, a modo de conclusión, ubicaremos los textos en el corpus del mundo literario en general y los puntos de vista que nos generaron las lecturas.












DESARROLLO



Con respecto a la concepción política, dos son las acepciones mas significativas de las cuales, Osvaldo Soriano, con su literatura dio cuenta.
Por un lado, encontramos la concepción tradicional, periodística, estado céntrico, en la que la política hace referencia al ejercicio del poder por parte del Estado, y por otro lado, esta la concepción que alude a la sociedad civil, y la libertad de los ciudadanos para tomar la palabra.
En cuanto a la primera cuestión, Soriano, en dos de sus obras culmines: “No habrá mas penas ni olvido” y “Cuarteles de invierno”, describió a la perfección y a su manera, narrativa y ficcionalmente la realidad nacional de la década del 70` (así como Arlt lo hizo en la Década Infame). La complejidad de este periodo se debió a las adhesiones y oposiciones generadas en torno a la figura de Perón, hasta la Asunción golpista de la dictadura. Ambos fenómenos reflejados en las obras citadas respectivamente.
La proscripción de Perón y su exilio provocaron el surgimiento de una serie de corrientes internas, con pocos puntos en común , salvo el del reconocimiento y acatamiento al líder, donde cada uno se adjudicaba ser la verdadera portavoz de dicha esencia partidaria:
Las corrientes de izquierda que tomaban como ejemplo a la revolución china, confiaban en el modelo de insurrección popular. Dentro de esta corriente hubo dos formaciones especiales ERP y Montoneros, de las cuales Soriano también supo emitir su opinión respecto a ellas;
La Iglesia y los curas del tercer mundo;
Las agrupaciones universitarias;
El ala sindical;
Y la política.[1] Dentro de esta última estaban los moderados, por así decirlos, como Campora, pero a la vez también coexistían con otros personajes “más duros” como López Rega, personaje del cual el “gordo” también opino en “Cuarteles de invierno.”
Toda esta convergencia de opiniones y formas de entender la corriente partidaria del peronismo, según nuestro juicio, en palabras de Osvaldo Soriano quedo muy simplificada.
Tomando como base: “No habrá mas penas ni olvido”, el autor narra, tal como argumenta J.P. Feinman en su prologo: [”Una guerra en la que todos se matan y mueren invocando a un ausente.”][2]. Reflejo de una manera novelesca un conflicto interno incomprensible, donde se lucha por un mismo ideal.
En una entrevista con Carlos Ares, para “La Maga”, expreso: [“¿Qué era eso de que Perón bautizara a peronistas que no lo eran y echara peronista que si lo son?...”.] [3]
En fragmentos de su obra explicita su duda: [“-¿Quién me cuestiona?/- El consejo superior del partido. / Dicen que Mateo es comunista y que usted lo protege. / Que son todos de la Tendencia, como los muchachos…”.][4]
[-“No/- Dijo el intendente/ - El gobierno provincial con el que estamos plenamente consustanciados en su defensa de la verticalidad justicialista, / sabe que estamos llevando adelante una lucha contra la sinarquía internacional que en Colonia Vela es comandada por el delegado municipal y la juventud que se dice peronista. / -¿Usted cree que es necesaria tanta violencia policial? pregunto un cronista. /– No
ha habido violencia policial, señor. / Son los marxistas que han atacado a las fuerzas del orden…”. 5
Se dijeron de esta obra, vacuidades de triste memoria. Que la novela no era tal cosa, si no un mero guión de cine, por ejemplo. Y quizás ese fue el mayor logro de Osvaldo. Con su economía de lenguaje, sus frases cortas y sus historias escénicas generó, que la historia sea cognoscible para el pueblo argentino o extranjero, con todas sus idas y vueltas.
Cuando hizo la presentación de este libro, el mismo Soriano expreso: [“Quiero intentar un modesto fresco de este clima atroz que negamos cada día…”]6
En cuanto a los personajes son como el señalaba, prototipicos, muy parecidos a los mortales:
Ignacio Fuentes: [-“Dicen que no soy peronista/-¿Qué no es peronista?-el placero se rió-; yo lo vi a usted alas piñas acá con Guzmán por defenderlo a Perón/-Los meto presos/El viejo placero se quedo pensando/-¿y que dice el comisario?/Ignacio recibió la pregunta como un hachazo…”]7
Mateo: [“¡Pero don Mateo de que va a vivir! ¡Tiene la señora enferma y la hija estudia en Tandil!”]
[“Entraron a la municipalidad/Ignacio cerro la puerta de acceso/ En la oficina Mateo estaba solo, encorvado en una silla/ Su cara se había vuelto pálida/ Al ver al delegado se puso bruscamente de pie// -¡Don Ignacio! ¡Nos quieren echar, don Ignacio!/ -Toma la escopeta. Vamos a resistir/ -¿Qué pasa, don Ignacio?/ -Dicen que somos bolches/ ¿Bolches? ¿Cómo bolches? Pero si yo siempre fui peronista…, nunca me metí en política…”]8
Suprino: [“Suprino parecía decidido, seguro de lo que iba a hacer/ El sabría entenderse con los militares, conocía a algunos de ellos/ El problema seria como pasarles un paquete tan delicado…// -No te van a creer lo de los comunistas- dijo/… Ni falta hace que se los diga. Para ellos, cuando un tipo como Ignacio saca una escopeta es como si se les apareciera el diablo…”//]9
Moyanito: [-“¿Cuánto ganas, Moyanito?/ -Ochenta y tres mil, mas o menos/ -Te nombro director de parques y jardines y te aumento a ciento veinte mil/- Gracias don Ignacio, no sabe la falta que me…”] 10
Cerviño: [“…Intento sacarlo del avión/ Cerviño se quejo y cayo de costado/ -Dejame…, los hicimos mierda… ¿Estas ahí, Juan?/ -Si, hermano, si/ -Decile a don Ignacio que me jugué por el…, que soy peronista y…que no les afloje…cuando el general lo sepa va a estar orgulloso…”.] 11
Caracterizan diversas personas, habitantes de un pueblo de Bs.As, con un mismo ideal partidario político.





Con respecto a “Cuarteles de invierno”, caracterizado muchas veces como la segunda parte del libro ya mencionado Osvaldo Soriano a través de un lenguaje simple y dos personajes resume lo que ocurrió en nuestro país en la década del 70. Un boxeador pronto a su retiro y un cantante de tango mediocre, viven en carne propia todo lo infame de una época oscura [“… La puerta de la pieza estaba abierta. Habían revisado mi valija sin tomarse el trabajo de acomodar nada. La cama estaba deshecha y el colchón colgaba hasta el piso. Llamé a la vieja/ eran tres señores armados. Ya vinieron otras veces, cada vez que llega al pueblo alguno que no conocen vienen a mirar…”.]12.
Los dos personajes solitarios cruzan sus caminos en una estación de trenes, donde se le presenta al lector una pista de lo que va a ocurrir, un soldado que los detiene y les pide todos sus datos y el motivo por el que están en Colonia Vela. El motivo simplemente cantar y pelear, nunca imaginarse lo que ocurriría después.
Ante la negativa de un autógrafo la historia comienza a arrastrarlos, porque así es la historia argentina. Su plan es irse al día siguiente a Buenos Aires; no tienen en cuenta que hay una dictadura; ellos solo quieren actuar en una fiesta para el pueblo, pero toman conciencia de que la fiesta la dan los militares.
Allanamientos, golpes y una pintada frente a la iglesia del pueblo que decía: “Andrés Galván, cantor de asesinos” son prueba de que algo en ese pueblo chato de calles anchas los estaba esperando [“… los soldados habían pintado la pared con cal aún podía leerse/ Andrés Galván/ cantor de asesinos/ -espere que se vayan-dije/ el jeep arrancó y cuando doblo la esquina cruzamos la calle/ Desde cerca el letrero se leía más claramente:/lo habían escrito con aerosol negro y hubieran hecho falta cinco manos de pintura blanca para taparlo/ En la ochava podía leerse todavía lo que yo buscaba/ Tome de un brazo a Rocha y la llevé hasta allí/ se quedo mudo, acercándose y alejándose de la pared recién teñida de blanco para convencerse de que no era una ilusión./ en cada Rocha/un torturador…”.][5]
Así es que Rocha y Galván, dos personas que por su oficio están aparentemente afuera de la política, empiezan a ser sospechados de comunistas. Una vez mas Osvaldo Soriano ínter cruza la realidad con la ficción haciéndonos ver que en la ultima dictadura nadie estaba exento y que la persona mas neutral podía ser la marca de quienes con violencia y abuso dejaron un dolor difícil de olvidar.
La irrupción de otro personaje como “Mingo, el ciruja del pueblo” trata de poner fin a la indiferencia de ese pueblo que aplaude de pie a la los torturadores.
La solidaridad de Mingo con Galván lo hace creador de su propia muerte, ante la cual los dos personajes toman conciencia y recuperan fuerzas para poner fin al abuso de los militares y enfrentarse a ellos.
“El Gordo” intenta mostrar a través de la pelea entre Rocha y Sepúlveda, el boxeador militar, la lucha del pueblo (Rocha) contra el estado de facto (Sepúlveda).aunque el final sea un cuerpo dolorido con huellas que no cicatrizaran jamás.
Soriano demuestra su poderosa conciencia civil y hace un enjuiciamiento a toda la sociedad argentina de aquellos tiempos, cuando se cerraban los ojos al genocidio. Esta denuncia queda al descubierto a través del final de la novela en donde Galván lleva a Rocha en una camilla hacia la estación de trenes, y todas las ventanas del pueblo están cerradas, no hay un solo gesto de solidaridad. El único es el del loco del pueblo, mingo, que termina colgado de un árbol.
Coincidimos con Ricardo Piglia quien dice: “Cuarteles de invierno es, tal vez, el mejor libro que se escribió en el exilio sobre la dictadura argentina, porque no es un libro con una denuncia directa, ni cuyo contenido explicito esta ligado a las atrocidades y a los horrores que conocemos. Es una metáfora concentrada en el enfrentamiento de ese boxeador que se ve obligado a luchar con el hombre que había elegido el ejército. “[6]
Con estas dos ejemplificaciones bibliográficas, intentamos dar cuenta de cómo sus textos fueron crónicas de un país desvastado. Y también de su rol intelectual, su compromiso para con la sociedad, a partir de su estilo antiacadémico y su línea absolutamente diferente, a la de los autores latinoamericanos- según Italo Calvino.
Autor que también comparo la trayectoria de Soriano con la de Hemingway: novelista y periodista estadounidense, que abandono la escuela para empezar a trabajar de periodista, cazador y pescador. Fue uno de los primeros escritores que aunó el lenguaje periodístico y literario.
El ya citado Hemingway, Chandler, Matheson, Quiroga, Arlt, y Cortazar fueron algunas de sus influencias. De este ultimo, podemos citar una semejanza de propuestas y propósitos en cuanto a sus productos literarios. Con la novela “Rayuela” propuso al lector un cambio radical en sus hábitos mentales frente al texto literario que implicara una mas activa participación ante una obra de arte dada. Con respecto a esto, Claudio Díaz, en sus “Breves reflexiones sobre literatura y política” argumenta: La mejor literatura nos obliga a la “reflexión crítica” y en este sentido nos devuelve al lugar del “ciudadano” que la metafísica del mercado nos ha escamoteado… Una lectura política debe buscar en las tramas del discurso literario todo aquello que permita ver las contradicciones y desgarramientos de nuestra sociedad. Leer políticamente, es establecer una línea de resistencia a la omnipresencia metafísica del mercado, a la naturalización de la exclusión, a la resignación y al olvido[7].
En cuanto a Arlt y Quiroga se asemejo en su pertenencia a un “Nuevo periodismo” y la posibilidad de crear los acontecimientos, trascender el realismo, universalizar el dialecto bastardo e integrar temáticas marginales.
Sintetizando o intentando resumir este aporte muy valioso de Soriano con respecto a la mutua relación entre política y literatura, y retomando la segunda cuestión que mencionábamos al comienzo, acerca de la toma de la palabra, publica, de una palabra que interviene en la vida social, “el gordo” intervino causando discusión, su permanencia y la insistencia en construir una patria en la que sus habitantes puedan sentir que están buscando lo mejor para todos y no la fortuna de unos pocos.



CONCLUSION
Después de haber leído y hacer un humilde análisis de “Cuarteles de invierno” y “No habrá mas más penas y olvido”, no nos quedan dudas de la genialidad de las obras de Soriano.
Ambas novelas son un registro claro de una realidad compleja de la historia argentina en donde se introduce una temática conflictiva que está más cerca del origen del hombre que de la escritura. La literatura aparece como una impostura, como una indagación sobre el devenir del hombre y su paso angustiado sobre la tierra.
En las narrativas de Soriano hay distorsión del discurso narrativo, superposición de planos expresivos gran dosis de ironía y amargura. El mundo representado por sus novelas es eminentemente interior, es el mundo de la conciencia.
La destrucción del lenguaje es otra característica. Se va hacia lo hablado, a las particularidades del propio pensamiento. La rebelión es contra el lenguaje académico, tradicional, solemne que no existe fuera de los libros. Se usa el habla diaria, que va de boca en boca o se gasta con el uso. Se reproduce lo coloquial o propio de los personajes, con un resultado a veces caótico como en la vida cotidiana. El uso del lenguaje hablado lleva a la quiebra de la sintaxis tradicional y a una comunicación más directa con el lector porque acorta distancias.
Las dos novelas son una observación profunda de la realidad local en donde se parte de una situación individual para ir a lo nacional. Acá es donde prevalece lo periodístico ya que las obras son un relato que bien podrían ser reales. Ambas historias pueden haber ocurrido en cualquier parte del país de aquellos años.
No podemos dejar de imaginarnos los relatos que hubiera hecho Soriano de nuestra Argentina actual con personajes como Duhalde, el matrimonio Kirchner o sin ir más lejos con la novela de las últimas elecciones provinciales en Córdoba. Sería la tercera parte de ese país convulsionado que nos describió y dejó en la memoria a todos los argentinos.
Creemos que las obras de soriano son verdadera literatura; ya que en esa verdadera literatura se puede comenzar a entender la historia profunda.



[1] ARIAS, Maria Fernanda y GARCIA HERAS, Raúl. “Carisma disperso y Rebelion: los partidos neoperonistas”. En: Perón del exilio al poder. Cántaro. Buenos Aires. 1994

[2] SORIANO, Osvaldo “No habrá mas penas ni olvido”. Prologo. 1ª ed. Booket. Buenos Aires. 2007

[3] ARES, Carlos. Entrevista para “La Maga”. En: “No habrá mas penas ni olvido”. 1ª ed. Booket. Buenos Aires. 2007

[4] SORIANO, Osvaldo. “No habrá mas penas ni olvido”. 1ª ed. Booket. Buenos Aires. 2007

5 SORIANO, Osvaldo. “No habrá mas penas ni olvido”. 1ª ed. Booket. Buenos Aires. 2007

6 SAMOILOVICH, Félix. “Soy una montaña”. En: Homenaje Nº 20 Revista “La maga”. Buenos Aires. 1997

7 SORIANO, Osvaldo. “No habrá mas penas ni olvido”. 1ª ed. Booket. Buenos Aires. 2007
8 SORIANO, Osvaldo. “No habrá mas penas ni olvido”. 1ª ed. Booket. Buenos Aires. 2007

9 SORIANO, Osvaldo. “No habrá mas penas ni olvido”. 1ª ed. Booket. Buenos Aires. 2007

10 SORIANO, Osvaldo. “No habrá mas penas ni olvido”. 1ª ed. Booket. Buenos Aires. 2007

11 SORIANO, Osvaldo. “No habrá mas penas ni olvido”. 1ª ed. Booket. Buenos Aires. 2007

12 Soriano, Osvaldo. “Cuarteles de invierno” 3º ed. Seix Barral, 2008

[5] Soriano, Osvaldo. “Cuarteles de invierno” 3º ed. Seix Barral, 2008

[6] Piglia, Ricardo. Génesis y escritura de Cuarteles de invierno en “Cuarteles de invierno” 3º ed. Seix Barral, 2008

[7] DIAZ, Claudio. Literatura y Política. Mimeo. 2006

lunes, 3 de noviembre de 2008

SER PLENO


- No hables tonteras negra no hay nadie que no quiera tener un hijo-

- Pero Kela(es mi abuela), no quieren.-

- No deben poder, mira sino van a querer, sino como van a sentirse realizados.-

Anoche mi abuela dijo esas palabras, con las cuales no me senti identificada, y las que queria refutar pero no podia, mi nona nunca iba a entender porque para mi un hijo no es lo que me haria sentir realizada. Pienso que en este momento todos los planes que tengo a presente y futuro no incluyen un hijo.

Para poder traer una persona a este mundo primero yo tendria que sentirme realizada para poder darle todo el amor que se merece, ya que no hay peor estado animico que la propia frustracion.
Porque esta sociedad impone lo que debo hacer, porque si no quiero tener un hijo o estoy loca, o soy una persona deshumanizada sin sentimientos, acaso ¿no puedo elegir?

Trato de imaginar todo lo que un hijo debe representar para un padre y seguro debe ser maravilloso, pero esa no es mi meta fundamental.(¿de aca a 30 años hare el mismo post?)